miércoles, 31 de marzo de 2021

“LA ESPERANZA”

 

"LA ESPERANZA"

La esperanza es lo último que se pierde.

La esperanza es cimiento de la felicidad, si está basada en valores.
La esperanza es confiar que, a corto plazo, se cumplan nuestras ilusiones, y no sean una añoranza.

Vivir es algo maravilloso.

Vivir es algo fantástico.

Perder el tiempo es un pecado de lesa majestad. El tiempo es irrecuperable, se pierde para siempre, y ya no se vuelve a vivir.
Tenemos que ser esperanzados.

El ser humano es maravilloso, lleno de esperanzas.

“¡Hemos nacido para -llenos de esperanza- compartir, ser felices y plenamente libres!”

“¡La esperanza de vivir la felicidad está en compartirla!” En especial en esta SEMANA SANTA.

Nadie puede dejar de ser feliz si comparte su vida y su felicidad con honestidad y en una constante y vital participación.

No dejo de tener una enorme esperanza. Creo ciegamente en el ser humano. Quiero ciegamente al ser humano. Necesito ciegamente al ser humano.

Mi esperanza se basa en mi larga experiencia de la vida.

Somos buenos por naturaleza. Sólo necesitamos continuar, constantemente, en todo tiempo y lugar, siendo honestos y participativos, y la felicidad y la libertad brillarán en todos nosotros por siempre jamás.

Tengo plena y segura  confianza y esperanza en que llegaremos a esa necesaria mayoría honesta y participativa, para tener y gozar, en este Planeta Azul de la Tierra, de la plena felicidad y de la plena liberad.

¿Lo cree? Pues, ya somos dos. Sólo nos faltan los demás. ¿A qué esperan?
Espero y confío que usted sea siempre -para el bien de los demás y el suyo- un honesto participativo, lo que es ser un hábitatista.

Si usted es un hábitatista, lo soy yo, y si conseguimos la mayoría de hábitatistas, volveremos a tener la plena felicidad y la plena libertad para lo que hemos nacido.


martes, 30 de marzo de 2021

“NO BASTA CON SER BUENO, HAY QUE APARENTARLO, HAY QUE DEMOSTRARLO”

 


“NO BASTA CON SER BUENO, HAY QUE APARENTARLO, HAY QUE DEMOSTRARLO

         Aforismos como este: “no basta con ser bueno, hay que de mostrarlo”, son una expresión de la experiencia traducida en palabras, para que con ellas transformemos en hechos eso que decimos en nuestra actuación.

Ese dicho o aforismo quiere decir que tenemos que ser buenos en hechos, palabras y en pensamientos, y demostrarlo.

        “¡ El ejemplo que demos los humanos, sea bueno o malo, siempre tiene repercusión en los demás!”

         “¡La libertad, - esa maravilla del espíritu humano, que lleva aneja la responsabilidad de nuestros actos-, nos permite hacer el bien o el mal,  y esa decisión dependemos  de ningún otro sino de nosotros mismos, aún en este mundo tan mediatizado!”

         “¡Actuar bien o mal, en cada caso, es la consecuencia de nuestra libertad!” Ahora lo podemos demostrar en esta SEMANA SANTA.

         Y esas decisiones se reflejan en los hechos.

         “¡Qué importancia tiene la educación recibida para intentar ser lo mejor posible!”

         “¡Debemos educarnos y educar en la libertad, para ser y actuar como personas libres!”     

 Hay el instinto natural de hacer el bien, pero se puede y se debe educar también para aprender a distinguir lo que está bien y mal: entonces la capacidad de acertar es más probable. Pero ese aspecto de la conciencia “hay que hacer el bien y evitar el mal”: se puede apagar con mucha facilidad y frecuencia. Creo que muchos estamos apagados, a oscuras.

         Mejorar que debería ser una constante: consistiría en acostumbrarse  y entrenarse a decidir con libertad acertando para elegir siempre el bien.

         Mi experiencia me dice que los años no disminuyen la obligación de dar buen ejemplo, quizá aumente esa obligación. Seguro la aumenta.

         “¡¡¡Siempre hay que estar intentando mejorarse!!!”

         Y no basta con deseos, tenemos que convertirlos en hechos.

         También yo creía que con los años dejaría de tener algunas malas tendencias, y no es así. Todos tenemos defectos que nos cuesta trabajo desarraigar. Pero …….

         “¡¡¡¡¡¡¡Tenemos que estar, hasta el final, luchando por ser buenos, en deseos, palabras y en hechos!!!!!!!”

“¡¡¡¡¡¡¡La mujer y el hombre cabal, hechos, son la mujer y el hombre que luchan por desarraigar sus defectos y por conseguir adquirir las virtudes!!!!!!!”

 No hay personas perfectas; hay personas que luchan por quitar los defectos y por adquirir las virtudes.       

“¡Para Aristóteles la felicidad la conseguía el hombre virtuoso!”

          ¿Qué enorme responsabilidad tienen, tenemos, entonces, las personas con cargos familiares o públicos? Mucha responsabilidad, sus actuaciones serán un ejemplo, para bien o para mal.

        No cabe duda que esa lucha por el bien tiene mérito, que desde el punto de vista cristiano es necesaria para alcanzar la patria celestial. Además tiene una importante consecuencia que con ella se reparte el ejemplo que debe servir para ayudar a los demás, ya que les mueve a luchar también, y en este sentido se aplica el aforismo:

         “No basta con ser buenos, hay que demostrarlo”, y: ¡así es! todos tenemos que luchar hasta que nos muramos, creyentes o no, todos, sin excepción.

         Si se es humilde se acepta que las ayudas de Padre Dios y de la Santísima Virgen del Pino son absolutamente necesarias, porque a veces las decisiones y actuaciones son difíciles y Jesús prometió que estaría con nosotros hasta el fin del mundo... Hay que estar, constantemente, rogándoles que seamos buenos y demos buenos ejemplos, para hacer el bien  hoy y para ganarnos la eternidad.

         “No basta con ser bueno hay que aparentarlo, hay que demostrarlo”.


lunes, 29 de marzo de 2021

“PUNTO Y APARTE”

 

“PUNTO Y APARTE”

Que sea esta época de Semana Santa el momento para el punto y aparte a todos los malos hábitos y malas costumbres; para buscar  apasionadamente la honestidad para la santidad, para amar con intensidad.

Que sea una época de examen de conciencia de todos y cada uno de nuestros recovecos morales, espirituales, sociales y habitatistas.

“¡Punto y aparte debe ser el hecho de la sabiduría del bien en la constante búsqueda de la verdad, de la felicidad y de la libertad!”

Punto y aparte debe ser para el olvido o la despreocupación de las grandezas y de las vanidades a las que el mal nos llama y nos persigue a todos por igual.

“¡El examen diario de conciencia es una necesidad única e irrepetible para vencer al mal y mejorar en el bien!”

“¡Siempre hay una oportunidad, que se debe percibir como necesidad, para mejorar!”

“¡El punto y aparte debe ser el volver a empezar en la vida personal, familiar, social, empresarial; en todo aquello en lo que se necesita la honesta participación!”

Punto y aparte, volver a empezar  -nunc coepi!- con la voluntad decidida de ser honestamente participativos en la búsqueda del bien de los demás sin pedir nada a cambio.

¡Padre Dios nuestro! ¿Cuántas infidelidades, errores y pecados tengo de los que arrepentirme y pedir perdón? Creyentes o no.

“¡El punto y aparte es el gran medio para conocernos lo mejor posible y sin equivocarnos!”

¿Dónde está mi corazón? ¿Qué es lo que ocupa un sitio destacado, o más espacio, en mi corazón?

¿Qué me domina? Unas veces será las ansias de aplauso; o el desabrimiento por alguna contrariedad; o la tristeza por ser mal entendido; o el desaliento por no recibir la reacción amistosa de quien se esperaba, etc. Que deseable son sus contrarios: el gozo de los honestos, de los humildes, de los grandes cuyo deseo es el bien, esto es, de los que reconocen el bien, lo realizan en su vida práctica y lo reparten.

El gran punto y aparte es recomenzar siendo siempre honestos, participativos, humildes, habitatistas y, sobre todo, amar. Y, si es posible, amar con apasionamiento e intensidad de forma que vibre y haga vibrar a la persona amada, a la comunidad amada y ojalá al mundo entero amado.

Por favor ¿usted qué opina?

Gracias.

Como creyente le deseo que: “Padre Dios le bendiga a su familia, vecinos, amigos y al mundo entero”


sábado, 27 de marzo de 2021

¿QUÉ RECUERDOS TENGO Y QUÉ ES PARA MI LA SEMANA SANTA?

 

¿QUÉ RECUERDOS TENGO Y QUÉ ES PARA MI LA SEMANA SANTA?       

      Los recuerdos son gratísimos, yo diría que imborrables.

         Nací y me criaron en una familia cristiana, y muy estricta.

         Me educaron de forma espartana, y no sólo no tengo ningún trauma, sino todo lo contrario, le doy, constantemente, las gracias a Padre Dios por haberme dado una familia en la que los valores humanos como la austeridad y una estricta exigencia nos enseñaron a despegarnos del bienestar y de los bienes materiales. Pero  en especial me educaron en los valores religiosos, que estaban por encima de cualquier otra consideración y valoración.

         Tuve, afortunadamente, una niñez y juventud muy felices, aunque me quedé huérfano de padre a los 10 años.

         Mis abuelos, mis tíos, toda mi familia se volcaron en mi hermana y en mí como huérfanos.

         Los valores familiares seguían en importancia a los valores religiosos, pero eran un pilar sobre el que apoyaban muchas cosas importantes para asimilar, el respeto a Dios y a su culto, que son el fundamento de las manifestaciones externas de piedad. Que yo creo que influyen mucho en cómo se vive y se ve después la Semana Santa. Por eso todo este preámbulo ha tenido su razón de ser, porque creo que según le han criado y educado a cada uno, así, supongo, que se vive y se ve la Semana Santa.

Y dentro de una de esas maravillosas vivencias y recuerdos de mi juventud está la Semana Santa.

         Era  una semana de vacaciones; se solía estrenar traje; las procesiones y visitas a los Monumentos eran un complemento directo y eran los tiempos que más dedicábamos a estar en la calle.

         En las procesiones nos veíamos con las amigas, amigos y compañeros; eso daba la posibilidad de que igual cuando terminaban, nos quedábamos conversando con unos y otros.

         No sólo eran las procesiones, objeto de veneración sino también de sano entretenimiento.

         Veíamos y comparábamos las Semanas Santas anteriores con aquella que estábamos viviendo, y hacíamos comentarios. Era, realmente impresionante, el prurito e ilusión por mejorar cada año los tronos y los elementos y componentes que acompañaban a los pasos.

         La Semana Santa era una época deseada y anhelada así como muy aprovechada. Lo normal era vivirla en la ciudad: no necesitar salir de viaje.

         Reitero, con cierta añoranza, -  aunque no soy de los que creo que “los tiempos pasados fueron mejores”-, sí tengo que decir con cierta añoranza el buen recuerdo que tengo de las Semanas Santas anteriores; aunque hay que decir que cada año aumenta la participación, en general, y las distintas iniciativas de Cofradías y organizaciones religiosas enaltecen la maravilla de la Semana Santa católica canaria.

         ¿Qué es para mí la Semana Santa?

  Algo tan importante como conmemorar LA PASIÓN, MUERTE Y RESURRECCIÓN  GLORIOSA DE NUESTRO SEÑOR Y HERMANO JESUCRISTO DIOS.

        “¡ Conmemoramos, nada menos, que la RESURRECCIÓN DE JESUCRISTO, que es el fundamento de nuestra fe y en donde se apoya nuestra futura resurrección!”

         “¡Vana y sin valor sería nuestra religión, como decía San Pablo: “si no hubiese RESUCITADO JESUCRISTO vana sería nuestra fe!”

         Es la Semana Cumbre del año, y el máximo acontecimiento, porque Cristo vive y es la gran luz, que nos ilumina para que le imitemos en su amor a Padre Dios y nos alumbre el camino para llegar al cielo. Por ello, hoy tenemos que felicitarnos por la RESURRECCIÓN DE JESUCRISTO, como felicitar a la Virgen del Pino, nuestra Patrona, por la resurrección de SU HIJO; yo lo hago con todo el entrañable y apasionado cariño que le tengo a este Distrito de Tamaraceite (de la Ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, España) en particular y a la fe que profeso.

         "¡Qué difícil me sería vivir fuera de Tamaraceite!" 

        "¡Que la SEMANA SANTA le sea una SANTA SEMANA!"

                        

                                                                                                                         


viernes, 26 de marzo de 2021

“¡DAR, AYUDAR Y COMPARTIR!”

 

“¡DAR, AYUDAR Y COMPARTIR!” 

“¡Dar, ayudar y compartir es la forma de vivir más libre y feliz!”

“¡No hay poder ni dinero que compre la felicidad y la libertad!”

“¡Somos felices cuando compartimos la misma felicidad con los demás!”

La propiedad de la felicidad no la tiene nadie terrenal. Ni el dinero ni el poder hacen la felicidad. ¡Qué se lo pregunten a los ricos!

La libertad no es propiedad de nadie. Nadie, ni nada, la pueden coartar o reducir a su voluntad.

Si me quedo con lo mío y no lo comparto soy un egoísta y, como tal, sufriré dolor al desprenderme hasta de lo que me sobra.

La vida es una continua decisión.

¿Qué decido ahora? ¿Quedarme con todo lo mío y no tratar de ayudar? ¿O soy tan generoso que comparto lo que me sobra?

Estas son preguntas que me hago y que quisiera contestar con toda honestidad, lealtad, y amor.

“¡La conciencia es la campañilla que no deja de sonar!”

Hacer oídos sordos al sonido de la campanilla, es tratar de acallar lo que no hay que callar: la voz de la conciencia.

Dar, ayudar, y compartir debe ser leiv motiv de todo ser humano que pretenda ser honrado consigo mismo y con los demás.

“¡El amor es el bálsamo que cura las heridas del desamor!”

Sin amor soy una campanilla rota de sonido ronco y estridente, como estará roto mi corazón, si no tengo amor.

“¡Dar, ayudar y compartir es el camino de la eternidad, de la santidad!”

Quién da, ayuda y comparte está en el camino de la santidad.

No hay camino, se hace camino al andar.

Comencemos a caminar por ese maravilloso y esplendoroso camino de la santidad.

Solo necesitamos ponernos en el camino y comenzar a andar.

“¡El camino lo iremos trazando y ensanchando en la medida que damos, ayudamos y compartimos!”

“¡Y la santidad será una realidad!”


jueves, 25 de marzo de 2021

“LA LEALTAD”

 

“LA LEALTAD”

La lealtad es la honestidad y sinceridad en el comportamiento debido por un compromiso con otras personas.

La vida humana necesita, imperiosamente, de la lealtad de los demás y la mía.

“¡Sin lealtad no hay felicidad ni verdad, y menos libertad!”

“¡La coherencia es una consecuencia de la lealtad!”

La sólida coherencia es el ejemplo en que muchos pueden apoyarse, la pueden imitar haciendo el bien y dejando el mal.

La virtud de la fidelidad humana es una consecuencia de la lealtad. Es la lealtad a algo muy bien establecido y comprometido.

“¡Sin la lealtad la convivencia es una mera coexistencia, dando como resultado la inseguridad y la desconfianza en los demás!”

“¡Para una vida social normal de mutua confianza, de honradez, se necesita la lealtad!”

“¡Un grave problema personal y social –quizá en todas las épocas– es la falta de lealtad en la comunicación, en la relación y en la convivencia!”

“¡Los pueblos necesitan para una vida tranquila y de feliz convivencia que sus habitantes convivan con lealtad y sinceridad!”

“¡La mentira, la corrupción, la manipulación de la verdad y de las circunstancias, es utilizada por aquellas personas desleales con fines bastardos tanto personales como institucionales!” Hay quién la utiliza en la política, como los poderes perversos.

“¡¡¡El respeto a la palabra dada y cumplida es una gran demostración de la lealtad y de la honradez interpersonal!!!”

Hay quien no le da valor a la fidelidad como si los compromisos adquiridos no tuviesen valor.

No cumplir con las obligaciones personales y sociales es ser un desleal, como lo son los que se aprovechan para enriquecerse, para figurar en la vida social y política, para medrar en el poder… para beneficiarse a costa de los demás. Esas personas son unos desleales, deshonestos y enemigos sociales.

Necesitamos a mujeres y hombres leales que llenen su vida de actos leales familiares, comunitarios y sociales, en los que nos podamos apoyar porque realizan su labor con honestidad, dignidad y lealtad.

“¡¡¡La lealtad es el amor a otros hecho realidad!!!”

“¡¡¡La lealtad nace de la virtud de la caridad!!!”

“¡¡¡La lealtad es una necesidad!!!”


miércoles, 24 de marzo de 2021

“¡¡¡LA GRAN INJUSTICIA SOCIAL Y NACIONAL A LA SEGURIDAD SOCIAL ESPAÑOLA!!!”

 


“¡¡¡LA GRAN INJUSTICIA SOCIAL Y NACIONAL A LA SEGURIDAD SOCIAL ESPAÑOLA!!!”

La gran injusticia social que se hace a la SEGURIDAD SOCIAL ESPAÑOLA es el trato, la consideración y los sueldos de las maravillosas personas que componen esta institución admirable.

“¡Las personas que están en la SEGURIDAD SOCIAL ESPAÑOLA cubren sus puestos con una vocación heroica, y son dignas del mayor encomio y felicitación!”

“¡Las personas que componen la SEGURIDAD SOCIAL ESPAÑOLA realizan una labor de valor incalculable, atendiendo a la SALUD DE LOS ESPAÑOLES!”

¿Qué hay más importante que la salud corporal? Los creyentes creemos que lo único que supera a la saluda corporal es la salvación eterna.

Después de la salvación eterna está la salud corporal. Eso es lo que hacen las y los gloriosos servidores de la SEGURIDAD SOCIAL ESPAÑOLA.

Todo lo que se haga por la salud es valioso. Muy valioso.

¿De qué me vale el poder y el dinero sin la salud corporal?

¡La riqueza material podrá ayudar al bienestar personal, pero nunca superará, ni igualará, ni alcanzará al bien de la salud corporal!”

Soy un beneficiario de la ayuda que me prestan las SEÑORAS Y los SEÑORES de la SEGURIDAD SOCIAL ESPAÑOLA. Hablo por propia experiencia.

¿Cómo puedo agradecer esa inestimable ayuda?

No basta con dar las gracias. Tengo que contar, al mundo entero, que soy un beneficiado de la SEGURIDAD SOCIAL ESPAÑOL, y que mi deuda es impagable.

No me cansaré de dar las más efusivas gracias, y de reconocer, de todo corazón y con mi mayor honestidad, la labor que realizan las SEÑORAS y los SEÑORES DE LA SEGURIDAD SOCIAL ESPAÑOLA.

¿Qué labor mayor puede realizarme una persona en mi vida corporal?

Cuidar, y como lo hacen, de todo corazón, y siempre con suma amabilidad, profesionalidad y heroicidad, y con la sonrisa en los labios, LAS Y LOS MARAVILLOSOS SERVIDORES de la SEGURIDAD SOCIAL ESPAÑOLA

Sean estas palabras la expresión y demostración de mis más efusivas gracias, agradecimiento y admiración a las SEÑORES Y SEÑORES DE LA SEGURIDAD SOCIAL ESPAÑOLA.

Como creyente, le pido a Padre Dios, a quien amo y adoro con pasión, que proteja a las y los maravillosos servidores de la SEGURIDAD SOCIAL ESPAÑOLA.

Padre Dios, bendice, protege y cuida a las y los servidores de la SEGURIDAD SOCIAL ESPAÑOLA, que nos cuidan con su profesionalidad, dedicación, heroicidad, y amor de santos.

“¡¡¡LA GRAN INJUSTICIA SOCIAL Y NACIONAL CON LA SEGURIDAD SOCIAL ESPAÑOLA es el trato que reciben, todas y todos, los que trabajan con esa vocación, dedicación, profesionalidad, heroicidad, y amor a los demás en la SEGURIDAD SOCIAL ESPAÑOLA!!!”

Anatema a los responsables.


martes, 23 de marzo de 2021

“MI GRITO DE GUERRA”

 


“MI GRITO DE GUERRA”

Mi grito de guerra, y ojalá desgarrador y convincente, por lo elocuente, potente y necesario es éste: “¡¡¡SALVEMOS YA NUESTRO PLANETA TIERRA!!!”

Salvar al Planeta Tierra es un hecho necesario y urgente para todos y cada uno de los seres que lo habitamos.

No podemos estar al pairo y despreocupados o pasar del problema de la subsistencia global en donde está usted incluido como responsable y como víctima. Nadie queda fuera de esta obligación.

Desde que tengamos conocimiento, y por la educación recibida y el deber y el honor, debemos comenzar la honesta obligación de cuidar y proteger a nuestro hábitat natural para que lo siga siendo.

Tenemos que ser levadura que fermente en la masa familiar, social, comunitaria, nacional y mundial.

No sólo lo podemos conseguir sino que lo debemos conseguir porque no hay otra alternativa y solución.

O cuidamos y no contaminamos, ni destruimos o se convertirá el Planeta Tierra en algo inhabitable, algo que se aproxima, ya está cerca.

Repito “MI GRITO DE GUERRA”: “¡¡¡¡¡¡¡SALVEMOS YA NUESTRO PLANETA TIERRA!!!!!!!”


lunes, 22 de marzo de 2021

“¡EL ODIO QUE LLEVAMOS DENTRO!”

 

“¡EL ODIO QUE LLEVAMOS DENTRO!” 

El odio, que llevamos dentro, lo vamos repartiendo a diestra y siniestra, empezando por la familia, los amigos y los conocidos, y se va extendiendo como una mancha de aceite.

"¡Recibir el odio de quién fue un amigo es una experiencia que ya nunca se olvidará!"

Hay quien, con su odio, inventa acusaciones para tratar de atacar a otro. Realimenta y hace así crecer aún más su odio, que lo impulsa como una adicción.

El odio es de los peores asesores que podemos tener.

"¡El odio enerva y desarrolla los malos instintos ofendiendo hasta al amigo!"

El odio que llevamos dentro, si no lo atajamos y apagamos, nos va convirtiendo en unos amargados, en unos esclavos, y a cada oportunidad que tenemos lanzamos diatribas, insultos a toda o a todo el que está a nuestro alrededor.

"¡El odio es el clásico bumerán: regresa donde partió!"

El odio, algunas veces regresa con la mayor aceleración que le impulsan el rencor, la envidia, y la maledicencia.

El odio cada vez se va fortaleciendo y desarrollando, y termina por dominarnos, y convertirnos en unos amargados y esclavos.

Solo hay un medio de atajar y hacer desaparecer el odio que llevamos dentro: POR EL AMOR.

"¡El amor a los demás es el bálsamo que cura las heridas que va dejando el odio que llevamos dentro!"

"¡El odio es el gran benefactor y aliado del mal!"

"¡El mal se aprovecha de los que tienen odio para hacer e imponer su voluntad!"

"¡El odio nos convierte en esclavos sumisos y obedientes del mal!"

"¡El odio solo se vence y se anula con el amor!"

"¡Quien no ama a los demás desarrolla odio y fortalece la esclavitud al mal!"

El mal se aprovecha de los que odian, al ser el caldo de cultivo de la discusión, del insulto, y del ataque sin piedad, tratando de acallar al adversario, incluso, hasta al amigo.

"¡El odio es el peor consejero que podemos tener!"

El odio que llevamos dentro, si no lo atajamos y desterramos, se apodera de nosotros y nos convierte en los grandes cooperadores del mal.

El odio que llevamos dentro es un mal que hay que desterrar, pues lo contrario se adueña de nosotros, y ya solo vivimos para insultar y maltratar.

"¡Desterremos el odio si queremos vivir felices y libres!"

"¡La felicidad y la liberad nacen y se desarrollan con el amor!"

"¡Sin amor, el odio que llevamos dentro nos abrazará y nos arrastrará al mal sin ninguna piedad de nosotros, sin contemplaciones!"

"¡El odio que llevamos dentro es el demonio en la realidad de la vida!"

 "¡El odio que llevamos dentro cada vez se desarrolla más dentro de nosotros!"

"¡El odio que llevamos dentro es el gran aliado del mal en el mundo!"

"¡¡¡Elimine el odio si quiere vivir en paz, felicidad y libertad!!!"

Bendita, bendito sea si ha conseguido eliminar el odio, porque ya vivirá en paz, felicidad y libertad.


sábado, 20 de marzo de 2021

“¿QUÉ HACER PARA AYUDAR?”

 


“¿QUÉ HACER PARA AYUDAR?”

Me educaron en el amor al prójimo y necesito ser de utilidad para ayudar.

Son ya muchos los artículos publicados, tratando de ser consecuente con la obligación de ayudar.

Ofrezco lo que tengo.

Cronológicamente no me queda mucho tiempo.

No basta con buena voluntad. Se necesita ser coherente, hacer las cosas lo mejor posible, y tratar de conseguir la aceptación y el concurso de los demás.

Por favor. Necesito que me ayuden. Necesito su ayuda.

¿Cómo puedo ayudar y llegar a muchas personas?

Mi sana envidia a quienes les leen cientos, miles de personas diarias.

¿Qué puedo hacer? Ser coherente me lleva a infundir que tenemos que ayudarnos partiendo de la honesta participación, y buscando la unión.

Solo puedo hablar de lo que sé.

¿Qué hacer para ayudar? Solo puedo aconsejar y rezar.


viernes, 19 de marzo de 2021

“¡EL TIEMPO!”

 

“¡EL TIEMPO!”

Es posible que el tiempo sea el argumento sobre lo que más haya escrito. Aún así, no creo haber agotado el tema. Por esta razón, hoy abuso de su paciencia y añado nuevas reflexiones.

“¡El tiempo es el tiempo que vivimos y que no vuelve nunca jamás!”.

“¡El tiempo que vivimos es el tesoro para repartir y acumular así la riqueza del bien y de la felicidad, con libertad!”.

“¡La eutanasia roba el tiempo, porque roba la vida!”

La eutanasia solicitada ¿es un suicidio en el que el otro es el verdugo que quita el tiempo a la vida?

"¡Eutanasia sí, pero que otro me mate o mate por mí!”

¡La vida es un continuo pasar de las horas y los días que deben llenar nuestra vida, y contribuir a llenar la de los demás!”

Compartir el tiempo es ayudar a quien tiene tiempo y necesidad de que le acompañen y repartan el contenido del tiempo, que es la razón de la existencia. Lo contrario es vivir en el vacío de la falta de amor y del tiempo compartido sin amor.

El tiempo es lo que tenemos cada segundo de la existencia, y que dura el tiempo que tenemos destinado, y no más.

“¡Compartir el tiempo es repartir la felicidad a raudales, que es lo que debemos tener y repartir para llenar la vida de contenido y valor!”

Dejar pasar el tiempo es perder la oportunidad de ser y hacer por el bien propio y ajeno, cuando deberíamos aumentar la felicidad al compartir el tiempo que es lo que  tenemos.

“¡Vivir sin preocupación de compartir y repartir el tiempo, es vivir en vacío!” “¡Este camino termina en la soledad: el vacío de amor y de la amistad, que son una necesidad!”

El tiempo debe ser el tiempo de corresponder a los deberes y derechos que todos tenemos, que necesitamos, y que debemos compartir con los demás, para que el tiempo se llene de valor y sirva de ayuda a los demás por el amor.

“¡El tiempo sin ayudar es el vacío absoluto de la realidad!”

Perder el tempo sin necesidad es dirigirnos al camino de la desilusión y de la falta de amor, que son los elementos que se necesitan para vivir feliz y contento.

“¡El tiempo es tiempo de merecer para ser feliz y contento en nuestro mundo de libertad y amor que enriquezca nuestra vida y la de los demás!”

 


jueves, 18 de marzo de 2021

“EL TRABAJO!”

 

                                                “EL TRABAJO!”

“¡El trabajo honesto dignifica al ser humano, quien debe de ser compensado según el trabajo realizado!”

“¡Trabajar es una forma de ganar el sustento, realizarse como persona y servir a la comunidad!”

“¡Servir a la comunidad no solo es un gusto y responsabilidad, es una ineludible obligación personal y social!”

El derecho al trabajo lo tenemos todos, salvo las excepciones de imposibilidad material o enfermedad que haya y que deben resolverse por otras vías.

Amar al trabajo es una virtud de los honestos y leales a sí mismos, a la empresa y a la comunidad. Es amar a los demás.

Mi trabajo no solo llena mi tiempo, mis ilusiones, vivencias, convicciones, creencias y valores, sino que me sirve para progresar como persona y sirve para ayudar a los demás mientras que nos pone en  el camino de la santidad.

“¡Si a mi trabajo solo le saco partido material, soy un egoísta que solo recibiré la paga temporal!”

“¡El trabajo debe llenar la vida de contenido y valor, y recibir la compensación debida a la labor!”

La paga es, y debe ser, la compensación al trabajo bien realizado, y si, además, ha sido hecho con la mayor honestidad, debe tener el plus merecido a ese añadido valor.

Los poderes perversos son los que se aprovechan del trabajo de los demás, esclavizan para enriquecerse a su costa y aumentar su riqueza y poder.

Uno de los gravísimos problemas de toda sociedad es el número y el poder e influencia de los poderes perversos, y si no hay quien los contrarreste arrollan a los demás.

Los poderes perversos pueden llegar a anular a una sociedad, contagiarla y llevarla a la destrucción. ¡Que se lo digan a algunos países!

Hay países inmensamente ricos en materias y recursos, y viven en la miseria porque hay un pueblo corrompido, del que salen sus autoridades corrompidas, anulando esas riquezas y aumentando la pobreza, y fortaleciendo a los poderes perversos.

No hay trabajo individual que pueda competir con los poderes perversos cuando son acompañados por el pueblo corrupto y deshonesto.

El círculo vicioso de autoridad corrupta de un pueblo corrupto, es la espiral de la muerte de cualquier pueblo, aunque sea mucha la riqueza natural.

El trabajo corrupto y el trabajador corrupto generan y dan lo que tienen.

El empresario corrupto genera y da lo que es y tiene.

El trabajador corrupto corrompe su trabajo y el de sus compañeros, hace daño a la empresa y debe ser castigado como lo debe ser el deshonesto empresario.

Solo conozco un medio de quitar la corrupción: la honesta participación social como valor y creencia, y ser parte del honor de la comunidad mediante  esa honesta participación.

El trabajador dignifica o condena su trabajo de acuerdo a su honestidad, sinceridad y lealtad.

“¡El trabajo es un derecho y una obligación dependiendo de los valores que se tengan y de los que tenga la empresa!”

El trabajo es una necesidad y un derecho de todos, que lo tiene que solucionar una sociedad honesta, participativa y leal.

“¡Sin honestidad, lealtad y amor no hay posibilidad de vivir humanamente, tener trabajo digno y ser feliz en libertad!”

El trabajo es una necesidad existencial, con una remuneración justa que permita vivir dignamente al trabajador, y que sea capaz de crearle riqueza a él mismo y a la empresa. Si todo se hace honestamente esta riqueza debe ser por igual.

“¡El trabajo es una necesidad a cuya solución tiene que cooperar la sociedad!”

“¡El trabajo dignifica, es el medio para ganar el sustento, y es un derecho inalienable al que tiene que cooperar la sociedad!”

“¡El trabajo digno es una necesidad personal y social!”

Quien no coopere es un enemigo social.


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