“DEMOCRACIA REAL”
En una democracia real, el poder no lo tienen las Instituciones, lo tenemos las personas.
Al menos lo tienen quienes lo ejercitan en la práctica: los que participan.
Cuando en una asociación sólo deciden unos pocos, difícilmente podemos hablar de poder del pueblo o de libertad. El panorama es distinto cuando decide la mayoría.
El individualismo, tan extendido y aceptado, está corroyendo a la democracia. Y, lo que es peor, está socavando a la libertad.
La vivencia de la libertad individual y la preocupación por el bien común son necesidades urgentes e imperiosas. Solo las alcanzaremos con la participación.
El bien común, debería ser tan común a todos como su bien particular.
El individualismo permite que el poder económico someta al poder político. La falta de libertad personal se normaliza. Ciudadanos convertidos en súbditos.
La sumisión destruye todo: comienza por el medio ambiente y termina por sojuzgar a las personas en nombre del estado del bienestar.
Las personas debemos ser el centro y eje de todos los movimientos económicos, políticos y sociales.
El individualismo es la semilla del totalitarismo: en el que todo está dominado por el interés colectivo, sin participación y sin iniciativa particular.
El actual estado del bienestar está fundado en el individualismo.
Para demostrar la afirmación basta contar el número de pasotas.
El individualismo puro equivale a sumisión y falta de libertad.
Importan más las cosas y los beneficios que las personas.
Si no nos hacemos cargo de la importancia y necesidad de la participación personal - en todos los órdenes – otros nos dirigirán de forma más o menos subliminal.
Hablamos, hablo de democracia y libertad, y ¿Qué hago? ¿Hago lo suficiente? En mi caso creo que no, tengo que hacer más.
No hay democracia real sin el verdadero poder en las personas.
¿Tenemos? ¿Tengo claro el concepto y vivencia de la democracia y libertad?
¿De verdad vivo y practico mi poder y libertad en todas las Instituciones y Asociaciones?
¿Se mata en nombre de la libertad y del derecho a la libre decisión en la democracia?
¿Soy libre con mi cuerpo y mi alma para hacer lo que quiero?
¿Es necesario participar en la vida de la comunidad?
De acuerdo a las contestaciones a las anteriores preguntas, así es nuestro presente y así será nuestro futuro inmediato.
Estimado Don Luis,me ha encantado su artículo de opinión.Es un lujo leerle.Gracias.Viviana
ResponderEliminarGracias, su amistad es un tesoro.
ResponderEliminarDon Luis: Se hace usted muchas preguntas y es la única forma de ir hallando respuestas.
ResponderEliminarEstos tiempos nos lavan el cerebro y a la gente se le han creado otras preocupaciones para que no se preocupe de lo importante.
Me ha gustado su opinión, espero poder seguir disfrutando de su sabiduría.Un saludo.
Gracias muy efusivas, en especial por participar opinando.Necesito, necesitamos ideas para, juntos, buscar y encontrar fórmulas que cooperen al bien común, de los demás.
EliminarQue sea un trabajo de muchos, y se convertirá en imparable.
Reitero las gracias, le felicito y le ruego sus aportaciones. Un fueretre abrazo.
Mi señor don Luis Angel: El abrazo es muy fuerte, le he añádido más letras.
EliminarQuisiera aclarar que el ruego de aportaciones, es eso: sólo el ruego. No quiere significar la menor exigencia. Encima de que me hace el honor y la alegría de participar,ya ha hecho muchísimo, por ello reitero las gracias y mi admiración.
Creo que hay demasiadas personas que pasan, y eso es muy malo, usted es lo contrario. Con todo afecto.
esto es solamente una prueba Luis , espero que llegue. Después va mi comentario Tere
ResponderEliminarHa llegado perfectamente. Gracias, significa mucho para este blog tus comentarios.
EliminarTe ruego hagas constar que es desde el gran Buenos Aires, Argentina.
Con todo cariño, gracias y un fuerte abrazo Luis.