“MILAGROS DE HOY”
Los milagros son hechos contra natura, o cualquier cosa
extraordinaria y maravillosa, para la que no encontramos explicación natural,
racional.
Vivimos a diario en un milagro, casi constante en
cantidad y calidad, que es la vida de hoy, de cada día, que va camino de
convertirse en pasado, en historia.
Subsistir ya es un milagro, por la destrucción constante
del hábitat natural.
No sólo la Naturaleza está siendo atacada con
consecuencias aterradoras, sino que además hay quienes efectivamente matan.
Caminamos con propósito certero a la autodestrucción, y
esto nos lo reclamará la siguiente generación.
El grado de agresividad que realizamos a diario en materia
y espíritu entre nosotros -los que nos decimos y nos llamamos seres humanos
racionales y libres- va camino de transformarnos y hacernos caminar como
animales irracionales y sin libertad.
¿Hasta dónde somos racionales hoy?
Ser racional es ser un ser con raciocinio.
Raciocino es la facultad de usar de la razón para
conocer y juzgar.
¿Qué es lo que realmente conocemos y qué es lo que realmente
juzgamos?
Vivir en comunidad sin conocernos y sin amarnos, y
atrevernos a juzgar sin conocimiento y sin amor, y seguir vivos es un milagro.
Matamos en nombre de Padre Dios. Matamos porque nos lo
imponen los poderes perversos y no nos revelamos, sino que matamos, y seguimos
viviendo (rodeados de guerras, en medio de guerras). Nos envenenamos y
envenenamos con animales y plantas contaminadas. Engañamos y matamos por
dinero. ¿Para qué seguir enumerando lo que todos sabemos que demuestra que
vivimos por un milagro?
La vida, el mundo, el hábitat natural, todos son
maravillas que tenemos que estamos convirtiendo en venenos mortales.
¿Cómo hacer reaccionar para que vivamos la honesta y
feliz realidad?
El hambre, la miseria, las enormes desigualdades, la
falta de trabajo, la inseguridad personal, las ciudades lugares inhabitables,
contaminamos no sólo el aire sino los espacios y las relaciones humanas…
¿Hacia dónde vamos?
¿Qué tenemos que hacer y qué debemos hacer?
Amarnos, amarnos y amarnos para respetarnos y cuidarnos
y alcanzar la felicidad en la ansiada y necesaria libertad.
Y para que vivir humanamente no sea un puro milagro.
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