“¡¡¡A LOS HÉROES DEL MUNDO!!!”

“¡¡¡A LOS HÉROES DEL MUNDO!!!”

“¡¡¡A los héroes del mundo!!!” Mi admiración y respeto.

“¡¡¡Los héroes del mundo ayudarán a salvar al mundo!!!”

“¡Para ser héroe es necesario ser honesto, participativo y amar a los demás como a sí mismo!”

Los héroes son la esperanza que, con su ejemplo, honestidad, dedicación y amor, nos enseñan, a todos, cómo es posible ayudarse y ayudar a salvar a los demás con el comportamiento personal.

El hábitat natural ha dejado de ser natural. ¡Qué se lo pregunten a los millones de familiares de los difuntos por causas de les efectos del cambio climático! Sin contar con quién no ha sido enterrado por no haber sido encontrado.

Creo que, nunca antes, hemos necesitado tanto a los héroes del mundo.

Benditos y alabados sean los héroes del mundo. Ellos son el ejemplo que debemos imitar para parar el holocausto final.

¿Cuánto se ha escrito, dicho y divulgado sobre el Holocausto? Hay otro Holocausto en el que participamos todos de manera suicida, porque nos condenamos y ejecutamos a nosotros mismos al no dejar de contaminar y destruir nuestro hábitat natural. Aunque, por desgracia, de natural ya no tiene nada.

Los héroes del mundo dan la esperanza y devuelven la ilusión: la esperanza y la ilusión de parar, ahora, este estado de anormalidad aterrador que acabará con millones de personas inocentes, cuya única razón para existir es que aún viven… pero que pronto dejarán de vivir porque usted, yo y todos contribuimos al holocausto final.

Yo no quiero ser culpable del holocausto final.

Yo no quiero contribuir a que la situación de aniquilación universal continúe. Tenemos que ser conscientes de las consecuencias de nuestros actos. Otro, por pasotismo, o por egoísmo, son aliados del mal, y nos dificultan ser honesto con nosotros mismo y con los demás.

No trato de disculpar o disculparme porque quizá no he hecho todo lo que debía para gritar a los cuatro vientos el mal que estamos haciendo que nos lleva al holocausto final.

 Soy creyente. Rezo sin cesar, pero no consigo que mis conciudadanos paren de contaminar.

Me siento culpable y no sé por qué. Constantemente me pregunto ¿Hago todo lo que debo por ayudar? Y no encuentro la respuesta que tranquilice mi conciencia, porque todo no solo sigue igual, sino que sigue peor.

¿Se da cuenta Usted de hacia dónde vamos? ¿Qué hace, qué dice, qué comenta para parar el holocausto final?

¿Estoy, estamos, en el desierto de la soledad?

Padre Dios ¿Qué puedo hacer? No quiero ser culpable de la muerte de inocentes que morirán si no paramos de contaminar.

A los héroes del mundo les ruego que, por favor, sigan siendo el ejemplo que debemos imitar para parar el holocausto final.

Y a Usted le pido que me ayude a proteger nuestro hábitat natural, para que no solo nuestra generación subsista, sino que subsistan las generaciones que vendrán.

Por favor, ayúdenme. Ayudémonos, y conseguiremos parar el holocausto final.