“¡¡¡A MI (NUESTRA) MADRE: LA VIRGEN SANTÍSIMA DEL PINO!!!” EN LA OCTAVA, EL DÍA DE LAS MARÍAS.

 

“¡¡¡A MI (NUESTRA) MADRE: LA VIRGEN SANTÍSIMA DEL PINO!!!”

 

EN LA OCTAVA, EL DÍA DE LAS MARÍAS.

 

A mi Madre la Virgen Santísima del Pino, le pido Su intercesión ante Su Hijo Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, para que nos libre de los males que atacan a la humanidad entera.

Virgen Santísima del Pino, quisiera ser un romero, que llegue a Tus plantas para pedirte perdón por nuestros errores y pecados.

Por los errores y pecados que cometemos constantemente los hombres y mujeres de esta tierra, y porque no nos unimos para, juntos, pedir Tu intercesión ante Padre Dios.

A Tus pies me postro, implorando tu mirada misericordiosa a esta sociedad atormentada.

Los individualismos, los pasotismos, los egoísmos, están destruyendo no solo el hábitat natural sino también el hábitat espiritual.

Tu intercesión es una necesidad vital.

No nos abandones, porque estamos caminando por el camino errado. No buscamos el camino correcto y necesario.

A Ti acudimos implorando Tu bendición, para que nos restablezcas en la felicidad y la libertad, que estamos perdiendo por nuestra desidia, despreocupación y deshonestidad en el comportamiento de cada día.

Tú siempre escuchas a quien implora Tu ayuda.

Necesitamos Tu ayuda para salir de esta pandemia, y de la espantosa crisis económica y social en que nos ha metido.

Con el espantoso complemento en la vida social tan directo y efectivo del pasotismo.

Cada uno “va a su bola”, y solo la juega en su terreno, olvidándose que somos seres sociales, y que vivimos en comunidad para ayudarnos como hermanos.

"¡¡¡A MI MADRE LA VIRGEN SANTÍSIMA DEL PINO!!!" le pido interceda por nosotros, que estamos en el caos en que nos han metido, y parece que nos conformamos y lo admitimos.

Seguro que nos oirás si nosotros nos oímos unos a otros y nos unimos. Si compartimos las ilusiones y los pesares, como hermanos que somos al ser hijos del mismo Padre Dios, que nos dio la vida y nos la conserva, por muchos errores y pecados que cometamos al olvidarnos que somos Sus hijos y por tanto hermanos.

Acuérdate, Virgen Santísima del Pino, de tus fieles que te pedimos nos ayudes en nuestros graves males, que en estos momentos nos afectan a todos por igual.

Intercede ante Dios, al que todos amamos y adoramos, aunque parezca que lo estamos olvidando.

Te lo pedimos con todo el corazón y el alma.

Bendita Virgen del Pino, nuestra Patrona, de esta isla de Gran Canaria. España.