“¡¡¡DARSE A LOS AMIGOS!!!” Y “!PARTE DE MI TESTAMENTO!”
“¡La vida tiene
sentido y valor cuando la compartimos con los demás!”
“¡El egoísmo es
el gran enemigo de la felicidad y de la hermandad, y de la feliz y libre
convivencia con los demás!”
Presiento que
mi muerte está cerca.
Moriré cuando
Padre Dios lo tenga dispuesto: mis sensaciones, presentimientos y creencias no
van cambiar el momento de mi muerte.
El momento de
mi muerte lo recibiré con los brazos abiertos por mi fe y amor apasionado a
Padre Dios, a la Santísima Trinidad, la Virgen Santísima, a San José, al Ángel
de la guarda (que me ha tenido y tiene que aguantar) y a toda la corte
celestial.
Presiento la
muerte y quiero y necesito decir lo mucho que ustedes han significado, y
significan en mi vida, en mi felicidad y en mi libertad.
Mi familia, mis
amigos, la comunidad, la humanidad y nuestro Planeta Azul, la Tierra, han
sido y son la gran felicidad de mi vida, y los necesito para compartir y
repartir y juntos gozar de esa felicidad y libertad que me han dado y que
reparto, con todo mi cariño AMOR Y AMISTAD a todos por igual.
Quisiera dejar
grabado para siempre lo feliz que he sido y sigo siendo, con la suerte de tener
mi familia y a tantos maravillosos amigos.
Ustedes han
sido el cimiento de mi vida. Me han dado razones, ilusiones y esperanza para
vivir con felicidad y libertad, lo que he vivido con intensidad.
Quiero dejar
constancia patente de esa dicha que he tenido y que ustedes me han
proporcionado con tanto AMOR Y AMISTAD.
Ustedes han
desarrollado mis ansias de vivir y de compartir, tratando de ayudar y devolver
la dicha que me han dado.
Ustedes le han
dado un especial contenido a mi vida. Lo que es impagable, aunque sí se puede
agradecer eternamente.
Tenemos que ser
un ejemplo de AMOR Y AMISTAD, que sirva para que otras y otros lo imiten,
tengan y gocen tanta felicidad y libertad como hemos disfrutado todos nosotros
con nuestro AMOR Y AMISTAD.
Soy, y repito,
un gran afortunado. Ustedes, con su AMOR Y AMISTAD, han fortalecido y
engrandecido mi AMOR Y AMISTAD, que anhelo, deseo y necesito compartir con el
mundo entero, hasta que me llegue la hora de partir a la presencia de Padre
Dios.
La vida y el
mundo que nos ha tocado vivir tenemos que compartirlo con verdadera hermandad,
repartiendo AMOR Y AMISTAD, para contribuir a hacer un mundo mejor, que es el
que todos nos merecemos, y que será de acuerdo a la honesta participación de la
mayoría de la humanidad.
En la medida
que compartamos ese AMOR Y AMISTAD, mejoraremos el mundo que nos ha tocado
vivir. Pero necesitamos que nos secunde esa honesta y participativa mayoría.
No dejemos
pasar este momento de felicidad y libertad: aprovechémoslos al máximo,
compartámoslo y estaremos haciendo y dejando un mundo mejor.
Compartir el
AMOR Y AMISTAD y darse a los demás repartiendo felicidad y libertad. Si lo
hacemos, el mundo mejorará.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Necesito y agredezco todos los comentarios que me puedan hacer, complementarán y enriquecerán este blog. La solución es la participación. Gracias.