“VER CON QUIÉN TRATAMOS LOS TEMAS”
Ver con quién tratamos los temas es una cuestión muy importante.
Todos tenemos poder de persuasión con el que ayudamos o dañamos.
“¡La buena voluntad y la honestidad reprimen el mal!”
Todos los que tratamos de informar debemos auto-criticarnos
continuamente y solicitar siempre la crítica de los demás.
Tratar de informa para llegar a amar, mediante el conocimiento de
las cosas.
Pero no basta con conocer: hay que saber, o tratar de saber, para
encontrar, tener y repartir la verdad.
La verdad no es subjetiva: es una categoría objetiva.
La verdad es el bien en las acciones y en las palabras, hechas y
dichas con honestidad.
Ver con quién tratamos los temas debería ser una preocupación
constante, porque nos interesa encontrar la ayuda, no el error.
Hay que rezar y hacer muchos sacrificios, contantes y sonantes,
buscando la verdad para tratar de informar correctamente.
Todos nos equivocamos. Por eso tenemos la obligación de corregir
los errores inevitables que cometeremos los que tratamos de informar, aunque lo
hagamos con responsabilidad y honestidad.
Benditos y alabados sean los buenos que con su buen saber y entender
nos ayudan a estar bien informados y a conocer la verdad.
“¡La verdad es objetiva, pero la subjetividad puede desvirtuarla!”
Recemos mucho, hagamos muchos sacrificios para que la verdad
brille como consecuencia de la información honesta que adquirimos y
transmitimos con la mayor objetividad, honestidad y santidad.
“¡Ver con quién tratamos los temas
es una necesidad y nunca debe ser una banalidad!”