“¡LA AUTORIDAD DE Y LA HONESTIDAD!”

 

“¡LA AUTORIDAD DE Y LA HONESTIDAD!”

La autoridad de la honestidad es tal, que no existe autoridad sin honestidad.

Nadie tiene autoridad si no es honesto por mucho puesto que tenga.

El cargo no da ni tiene autoridad. La autoridad la da la honestidad.

Hay quien tiene autoridad sin tener cargo alguno. Tiene autoridad por su honestidad personal.

“¡La honestidad es el cimiento de la felicidad y con la felicidad y autoridad se llega a la libertad!”

Hemos nacido, si somos educados, para tener autoridad, impartir autoridad y dar ejemplo de lo que es tener autoridad. Lo damos cuando somos honestos y vivimos respetando la libertad.

“¡Hemos nacido para la libertad, y la libertad solo se alcanza con la honestidad!”

La honestidad con autoridad es la que deben tener los políticos o cualquier responsable en la comunidad.

Con honestidad y autoridad se deben resolver los problemas que indica y plantea la comunidad.

No hay poder ni autoridad, aún con honestidad, que no esté sometido al bien de los demás.

“¡La autoridad se creó como medio para ayudar!”

Es asombroso comprobar que hay autoridades en democracia que abusan de la autoridad, como si fueran dictadores en la libertad.

La dictadura se ha extendido dejando de ser unipersonal, ahora lo es pluripersonal.

Quien tiene autoridad, si no tiene educación, será con toda seguridad un dictador sin honestidad.

La autoridad con la honestidad es la solución al bien personal y social.

La autoridad que da la honestidad incrementa la libertad.

La autoridad de la honestidad es el bien que se necesita en sociedad.

“¡¡¡No hay bien, ni libertad, ni autoridad sin honestidad!!!”