“¿QUÉ HAY DESPUÉS DE LA MUERTE?”

 

“¿QUÉ HAY DESPUÉS DE LA MUERTE?”

¿Qué hay después de la muerte? Los no creyentes creen que no hay nada, que todo se acaba en ese instante y por toda la eternidad.  Los creyentes creemos que después de la muerte hay un Padre Dios todo santidad y bondad que nos espera para darnos un cielo felicísimo y eternamente.

¿Qué puede pasarle a un no creyente honesto si existe Padre Dios? Que se encontrará con una visión inigualable de Padre Dios en donde su misericordia y su bondad son infinitas. Creo que por un si acaso, deberíamos prepararnos para rendir cuentas –lo lógico, como hacemos los hombres, pues  no somos Dios– y pedir que nos acoja en su bondad y eternidad.

¿Qué puede pasarle a un creyente en Padre Dios y que a su muerte encuentre que no exista? Nada, porque estará en la nada de la nada. Todo habrá sido nada. Ni sentirá ni padecerá porque deja de existir. Solamente dejará, como todo ser humano, creyente o no, la huella de su pasado. Desaparecería totalmente, solo dejando por un tiempo el rastro de su vida, y nada más, y nada más. Pero esta situación no encaja fácilmente con la realidad de nuestra existencia. Existimos por algo y para algo.

Creo que deberíamos pensar en la muerte. Y no digamos a los que tenemos años.

Se muere solo una vez, como se nace una sola vez (no creo en la reencarnación). Debemos pensar, constantemente, en nuestra vida y en nuestros hechos. Cómo vamos llenando la vida.

“¡Pasarse toda una vida haciendo el bien, dando todo lo que se tiene, y ayudando, como han sido santos creyentes tales como Santa Teresa de Jesús, San Agustín, San Ignacio de Loyola, San Josemaría Escrivá, Santa Teresa de Calcuta… y que eso quede en nada de nada, me parece una injusticia que ni los humanos somos capaces de hacer!”

La injusticia es una verdad y realidad, para el presente y para el futuro, cercano o lejano. La injusticia es falta de justicia.

¿Cómo es posible que un ser limitado, como somos los seres humanos, pero con unas enormes capacidades de hacer, de amar, de ayudar, de ser libres, auténticamente libres, todo se quede en la nada de la nada con la muerte? Me parece una injusticia tan grande que sería la mayor que podemos tener en toda una vida cargada de hechos y vivencias del bien, del amor, de la libertad.

¿Qué hay después de la muerte? ¡Lo que hay! Y no lo que cada uno quiera creer.

¿Qué hubo antes del Mundo, y antes de nuestra vida? ¡Lo que hay!

¿Qué hay después de la muerte?