“¡¡¡SER UN SERVIDOR Y AMIGO DE USTED!!”

 

“¡¡¡SER UN SERVIDOR Y AMIGO DE USTED!!”

Ser un servidor de usted es darme la oportunidad de tratar de ayudarle en todo aquello que pueda, y cuando no pueda pedir y rezar a Padre Dios para que me ilumine y pueda servirle y serle de utilidad.

No sé quién o quiénes están tratando de crear seres humanos deshumanizados.

El mal está consiguiendo dominar, porque lo estamos apoyando con nuestro egoísmo, pasotismo, y falta de AMOR Y AMISTAD.

El bien es la meta diaria a alcanzar, para compartirlo con los demás, y, así, crear la honesta unión participativa y fraternal.

La unión honesta y participativa -que eso es la fraternidad- es el gran logro suyo y del resto de la humanidad. Sin usted es muy difícil encontrar el camino que debemos recorrer.

“¡¡¡Compartir el bien con los demás, eso es la fraternidad!!!”

La humanidad es usted, su familia, sus amigos, sus vecinos, también yo, y todos los demás.

“¡¡¡La honesta y participativa unión sigue siendo la solución!!!” Eso es la hermandad, eso es la fraternidad.

Por favor, amigo mío: ayúdeme, para que podamos caminar juntos por el sendero luminoso y glorioso de la hermandad, de la fraternidad.

“¡La hermandad, la fraternidad es más fácil que la maldad!”

¿Cómo llegar a su bendito corazón?  Me tiene a su entera disposición.

Ser un servidor de usted engrandece mi vida, le da valor y contenido, y me pone en camino de la santidad.

Sin usted mi vida vale poco, tiene poco valor, solo me quedaría rezar y pedir la santa iluminación.

Rezaré, una y otra vez, para que Padre Dios me indique el camino que debo recorrer para llegar a su amistad.

Su amistad es el baluarte que me permite vencer al mal.

Sin usted el vacío será mi acompañante en el camino de la vida.

Buscaré, rezando, la forma y manera de conseguir su amistad. Y con su amistad, juntos conquistaremos y venceremos al mal, fortaleceremos la hermandad y acrecentaremos la felicidad y la libertad.

Padre Dios nuestro: dame la humildad, la fe, la sabiduría y la santidad necesarias para convencer a mi amigo para que, juntos, conquistemos el mundo repartiendo AMOR Y AMISTAD.

El mundo debe ser lo que es: un lugar para vivir y compartir la felicidad, aumentar la libertad, y fortalecer y engrandecer la hermandad.

La libertad nos espera: es el camino que debemos recorrer, para, juntos, compartir y vivir la plena felicidad.

“¡¡¡Compartir y repartir felicidad y libertad es la gloria terrenal!!!”

“¡¡¡Con la libertad se consigue la plena felicidad!!!”

La libertad nos hace grandes porque podemos decidir y elegir entre el bien o el mal.  Tenemos la autoridad y el poder de decidir lo que queremos ser.

Yo quiero ser su amigo. ¿Usted qué quiere ser? ¿Quiere ser mi amigo?

Se nos ha dado la  libertad, un bien casi sagrado, para compartir y repartir juntos el AMOR Y LA AMISTAD con toda libertad.

Por favor, amigo mío, ¿a qué espera? Sabe que le necesito para repartir la felicidad y la libertad. Así seremos un ejemplo para que otras y otros sean felices y libres de verdad.

“¡¡¡Juntos conquistaremos el mundo!!!”

Ser su servidor acrecienta mi felicidad y mi libertad.

Ser su servidor me pone en el camino de la santidad.

Ser su servidor es mi meta.

¿Qué quisiera ser? Su servidor y su amigo de verdad.