“LAS ASOCIACIONES DE VECINOS”
“¡Las
Asociaciones de Vecinos nacieron y crecieron para que, los vecinos, unidos, acordasen
por qué luchar y hacerlo!”
“¡La
Federación nació para, unidas las Asociaciones, tener el poder de exigir el
cumplimiento de sus acuerdos!”
Solo fueron necesarias tres aptitudes: ser solidarios,
participativos y honestos.
Aquellas
señoras y señores tenían un corazón grande para quienes les rodeaban.
Con
todos estos ingredientes se solucionaron problemas fundamentales y se pusieron
los fundamentos para luego poder buscar las soluciones del futuro, tales como
Más
tarde algunas Asociaciones se politizaron -cosa que se previó venir y se
avisó-, lo que provocó su decadencia: lo fundamental había sido conculcado. Las
Asociaciones ya no tenían el cimiento firme y poderoso de la sincera y
desprendida honestidad de la participación. Estaban contaminadas y no tenían la
autoridad y el poder de la independencia. Se mediatizaron.
Parecía
como si se considerase más importante al partido que a la comunidad.
A lo
dicho se ha unido un pasotismo generalizado y un individualismo aislante, que
tanto daño causa y lo seguirá causando.
La
necesidad y funcionalidad de las Asociaciones siempre existirán, por una razón:
siempre habrá problemas sociales que nos afectan individualmente y cuya
solución es la unión.
“¡¡¡A
mayor libertad se necesita mayor participación!!!”
“¡¡¡No
existe auténtica libertad sin la participación!!!”
El
individualismo y el pasotismo son dos grandes carcomas del edificio de la
libertad individual y colectiva.
La
unión y la participación con la honestidad son la auténtica y definitiva
solución de los problemas, y no digamos en esta crisis.
Por
supuesto, esto es un proceso que comienza con la educación a los hijos para que
luego lo conviertan en propia e instintiva vivencia. Esto es dar valores a los
hijos.
La
solidaridad, la participación y la libertad no se improvisan, son una
consecuencia de nuestras creencias y la práctica de las mismas. Se necesita que
brille la dignidad de la persona humana.
Nunca
hubo tantos problemas y nunca hubo tanta esperanza.
Por
eso, muchos seguimos luchando en este trabajo y en este esfuerzo.
“¡¡¡El
pueblo unido jamás será vencido!!!”
¿A
qué viene todo esto?
Como
siempre, de usted, de mí, de todos nosotros depende.
Y si
a lo dicho alguna persona le suena a cantos de sirena, mal asunto, estamos peor
de lo imaginado.
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Necesito y agredezco todos los comentarios que me puedan hacer, complementarán y enriquecerán este blog. La solución es la participación. Gracias.