“¡UNA FORMA DE SANTIGUARME!”
He comprobado, al
menos así lo siento, que Santiguándome con las dos manos al mismo tiempo,
ofrezco todo mi cuerpo a LA SANTÍSIMA TRINIDAD, y me siento más cerca de LA
SANTÍSIMA TRINIDAD.
Santiguarme de esta
manera hace que me sienta más cerca de Padre Dios, del Hijo Jesucristo Dios y
hombre verdadero, y del Espíritu Santo Dios.
La forma de
Santiguarme con las dos manos es la siguiente:
Subo las dos manos, al mismo tiempo, a la frente y digo: En el nombre del Padre; luego las bajo, las dos juntas, al pecho y digo: En nombre del Hijo; luego, cruzando las dos manos y brazos, las subo haciendo una cruz en aspa, al poner la mano derecha en mi hombro izquierdo, y la mano izquierda en mi hombro derecho, digo: En nombre del Espíritu Santo; y finalmente desplazo la mano derecha al hombro derecho, y la mano izquierda al hombro izquierdo, y digo Amén.
Además ese cruzar las dos manos y brazos, subiéndolas a los hombros haciendo una cruz en aspa, se podría hacer en sustitución de la unión de las manos a la altura de la cintura en posición de plegaria.
Cruzar las dos manos y brazos, subiéndolas a los hombros es también como darse un abrazo a uno mismo, para tener presente el mandato de Jesucristo de amarnos primero a nosotros mismos, para poder amar al prójimo.
Le ruego pruebe y me cuente qué le parece, y qué siente.
Por favor, le agradezco mucho su experiencia, para ver si todos tenemos sentimientos semejantes para llegar a estar más unidos con LA SANTÍSIMA TRINIDAD.
Esto debería ser la meta de cada día.
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