“¡AÚN NO HEMOS CONSEGUIDO DAÑAR AL SOL!”

 

“¡AÚN NO HEMOS CONSEGUIDO DAÑAR AL SOL!”

¿Por qué el comportamiento de una parte importante de la humanidad es autodestructivo? No tengo los elementos ni los conocimientos para definir y hacer un juicio, profundo y real, del porqué de tantas atrocidades que cometemos a diario autodestruyéndonos. Pero sí vivo las consecuencias.

¿Usted se flagela a diario? Si no lo hace ¿por qué nos flagela a los demás?

¿Usted no comete ningún acto contra el hábitat natural? Si no lo hace bendito sea, pero si lo hace es reo de maldad, contribuyendo al deterioro local, nacional y universal.

¿Cómo puedo llegar a la conciencia del pasota, del despreocupado, del malvado que daña a los demás con su comportamiento deshonesto y desleal con el hábitat natural? No lo sé. Lo único que sé es que vivimos sus nefastos efectos.

Cada vez que tira un plástico, cada vez que ensucia los espacios públicos, cuando conduce su flamante coche, cuando vive y actúa despreocupado de los demás... nos está haciendo un daño que puede ser irreversible (ser un sumando de los demás) con efectos que nos dañan y le daña, por igual a usted, a los seres que quiere y a los demás.

“¡¡¡Su libertad termina en el momento que daña a un tercero!!!”

¿Es usted una persona educada en valores? Si lo es no debería ser usted un enemigo del hábitat natural.

Esta alocución va para los malvados que no respetan lo que es de todos, para los que dañan aún a su entorno y a los demás.

“¡Hay quién contamina desde que se pone en marcha!”

¿Cómo llegar a los desaprensivos cuya vida es un tormento y un daño constante para los demás, como son los poderes perversos, y algunos particulares? No lo sé. Pero sigo con mi relato por conciencia, por amor a la humanidad, y por amor y necesidad del hábitat natural.

“¡La esperanza nunca se debe perder!”

“¡La esperanza es la gran ilusión, y hasta la necesidad, de la vida!”

Vivir sin esperanza es haber entrado en la espiral del mal, porque el mal se aprovecha de su debilidad para hacer su agosto, dañar y convertirlo en su propiedad.

La felicidad es todo lo contrario. La felicidad es vivir de acuerdo a los valores y creencias que nos dieron nuestros padres como LA AMISTAD y el AMOR A LOS DEMÁS, cargados de honestidad y lealtad.

Aún no hemos conseguido dañar al sol, pero sí a sus efectos en el medio natural: árboles que florecen en primavera y en otoño; huracanes de más de trescientos kilómetros por hora; lluvias arrasadoras y mortales…. con muertes humanas, lo que es irreparable, dejando a sus familias sumidos en la tristeza por la ausencia de los fallecidos.

Aún no hemos conseguido dañar al sol. Pero si a sus efectos.

Los maravillosos adelantos y progresos de la humanidad están siendo mal utilizados y convierten lo que es un medio en un fin con lo que hemos regresado a la esclavitud: la sumisión aterradora del móvil, del coche…

Si aún vivimos algo natural, si sobrevivimos -los que aún no hemos muerto por causa del cambio climático- es porque aún no hemos dañado al sol.

¿Hace un uso correcto de la libertad? ¿Se siente feliz y contento con la vida que hace? ¿Se siente feliz y libre de verdad? Si usted es de esas personas, no nos puede dañar ni dañarse. Usted es una necesidad.

“¿Se para a pensar lo que hará desde que se levanta hasta que se acuesta? ¿Termina el día satisfecho y con su conciencia tranquila y satisfecha?” Si es así, este tema no va con usted.